Antigua terminal del aeropuerto de Leon.
Mostradores de facturación del aeropuerto.
Interior de la terminal.
El origen del aeropuerto de León se remonta a 1920, cuando mediante disposición ministerial aparece el futuro Aeródromo Militar de León. No es hasta 1924 cuando comienzan las obras con el objetivo de crear un aeropuerto de escala para las aeronaves de la ruta aérea Asturias-Madrid. En 1929 el aeropuerto se habilita de forma provisional para prestar sus primeros servicios de navegación aérea comercial.
Esa primera base aérea se situaba aproximadamente en el mismo lugar que la actual: un páramo, desde el que se divisa la capital leonesa, rodeado de tierras de labranza actualmente abandonadas. Las obras de acondicionamiento anteriormente descritas dotaron al aeropuerto de cuatro hangares para el almacenamiento y reparación de aeronaves así como los servicios básicos de combustible, agua y teléfono. Una manga de viento, una señal en el centro del campo y diversas ayudas a la navegación constituían el resto del complejo que por aquel entonces era la sede del grupo 21 de reconocimiento de la Escuadra número 1 del Parque Regional del Noroeste.
Durante la Guerra Civil, el aeródromo de León se convierte en sede de numerosas unidades aéreas lo que es clave a la hora de entender su historia, pues tras la guerra fue catalogado dentro de la “Clase A”, permitiendo esto su crecimiento durante la década de los 40. En estos años se realizan importantes mejoras técnicas en el aeródromo como la colocación de balizamiento nocturno, un radiogoniómetro y la implantación de instalaciones de radio.
Es en esta época cuando se decide crear la Academia de la Aviación, de la cual salieron las primeras promociones de la Academia General del Aire. Tras unos primeros años de funcionamiento la Academia fue sustituida por la Escuela de aprendices a la que se unió la de Especialistas del Ejército del Aire, actual Academia Básica del Aire.