Bajo este título vamos a explorar algunos de los más peligrosos aeropuertos del mundo. No todos serán por sus pistas cortas o su altitud, algunos tienen aproximaciones arriesgadas o difíciles como el Reagan National en Washington DC, que está situado en un lugar complicado, junto al río Potomac y los pilotos deben sortear algunos espacios aéreos prohibidos cercanos a la Casa Blanca y al CIA, o el Aeropuerto Internacional Princess Juliana (St. Maarten) donde la pista es de apenas 2 mil metros de largo, una longitud cómoda para aviones pequeños o medianos, pero en el que muchas veces deben aterrizar algunos Boeings 747 o Airbus A-340.
Esta semana nos vamos a Gibraltar. Justo al entrar desde España en el territorio, a la izquierda, se encuentra la terminal aérea, donde están los servicios de un aeropuerto.
¡OJO AL DATO!
El aeropuerto tiene una única pista de 1.829 m de longitud, y como curiosidad tiene una calle que lo atraviesa por el medio.
El aeropuerto se encuentra en el istmo que une Gibraltar con España. Dicho istmo forma parte de facto de Gibraltar, pero su soberanía se encuentra disputada. La pista del aeropuerto y demás instalaciones aeroportuarias se encuentra inmediatamente al sur del límite entre los territorios bajo control británico y español ("frontera" según el punto de vista británico, y sólo "verja" según el español, que no reconoce la soberanía británica sobre el istmo).1
Fue construido durante la Segunda Guerra Mundial e inaugurado en 1949, aunque en un principio sólo servía como base de emergencia para el Ejército Británico. El 2 de diciembre de 1987, un acuerdo entre los gobiernos español y británico acordó el uso civil de la instalación, que no fue puesto en práctica ante la oposición de las autoridades gibraltareñas.
En 2006, un nuevo acuerdo firmado en Córdoba entre Gran Bretaña, Gibraltar y España, terminó con las hasta entonces restricciones en cuanto al uso civil del aeropuerto, permitiendo también vuelos con España, siendo el 16 de diciembre de ese mismo año cuando un avión de Iberia procedente de Madrid-Barajas aterrizó en Gibraltar, poniendo fin así a años de conflictos.
La compañía British Airways, a través de su franquicia GB Airways, enlaza ambas ciudades desde mayo de 2007 diariamente, pero debido al poco éxito de sus vuelos cancelará a partir de septiembre todos sus trayectos con destino a Madrid. Las causas esgrimidas han sido la falta de slots en el Aeropuerto de Barajas y las próximas obras de la terminal gibraltareña que podía ocasionar más dificultades a esta compañía. No obstante British Airways afirma que a finales del 2008 volverá a reabrir la ruta.2
El Gobierno de Gibraltar anunció que construiría una nueva terminal de pasajeros como parte de estos acuerdos del Foro de Diálogo sobre Gibraltar. Lo esencial del acuerdo consiste en construir una terminal que permita su utilización como un aeropuerto Schengen. Esto supone construir una prolongación de la terminal hasta la verja, de modo que los pasajeros en procedencia de y destino a la zona Schengen no necesiten control alguno, y en cambio los de procedencia de Gibraltar o fuera del territorio Schengen y destino a éste pasen el control de frontera exterior en el lado español de la terminal, al norte de la verja. Simplemente se trata de situar, a horcajadas en la verja, el control aeroportuario británico junto a un nuevo control español de frontera exterior aeroportuaria y de permitir una zona de tránsito en la nueva terminal.3